Traductor

3 de septiembre de 2015

El Látigo, una nueva sensación.

Resultado de imagen de latigo Mi Señor ha creído oportuno practicar con su látigo, hasta este momento yo disfrutaba de su mano, los floguers, fustas, palas y otros instrumentos, pero no del látigo pues mi Amo pensaba que no estaba preparada para ello, y hace ya varias sesiones empezó a utilizarlo en mí.

Es una sensación intensa la que deja el látigo al chocar contra la piel, se siente como una rápida rozadura que te quema en un instante y el dolor agudo perdura unos minutos. Un escalofrío recorre todo el cuerpo si se ha tenido buena puntería. Un dolor no apto para cualquier masoquista principiante, tan intenso que te sube la adrenalina rápidamente. Un dolor que puede cortarte la respiración. 

Yo pienso que mi Amo quiere practicar con el látigo poco a poco para que me vaya curtiendo y sepa cual es la sensación que produce al ser golpeada por él, que sepa de su dolor, y luego al utilizarlo como castigo o como entretenimiento valore la potencia y efecto de cada latigazo. Creo que mi vena masoquista está satisfecha, un reto más en mi posición de sumisa, sin contar que con ciertos latigazos mi lívido se puede despertar. Es excitante.

.