Con una máscara de látex negra, llena de cadenas un día me inmovilizaron, solo serví para recrear la vista de los asistentes,. una obra de arte, daba igual quien fuera si hombre o mujer, solo los brillos del traje y la luz reflejada en las brillantes cadenas era lo que importaba. Una escultura valiosa o un jarrón, esa fué mi misión.